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Definitivamente tenemos que dar un giro a nuestra economía en los próximos años si queremos una realidad diferente para nuestro México.

Todos sabemos que los países que lideran el mundo son aquellos que han centrado sus economías en la innovación y en la generación de riqueza por medio de un proceso que lleve al nuevo conocimiento. Al principio, en ese cambio de giro, la inversión y la incertidumbre son altos, pero cuando un país decide apostar por un ecosistema de innovación, los resultados son visibles en muy pocos años; tal es el caso de Israel, un país pequeño y rodeado de “enemigos” el cual decidió crear un ecosistema de generación de nuevo conocimiento integrado por los empresarios, el gobierno y los investigadores, mismo que a la vuelta de algunas décadas ha puesto a este pequeño país en el centro de la innovación y del emprendimiento mundial; tomando en cuenta sus invenciones con respecto al número de habitantes.

Veamos a nuestro México:

Según una investigación del CONEVAL (Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social), en 2020 México contaba con 43.9% de la población,  55.7 millones de personas en condiciones de pobreza multidimensional, con 10.9 millones (8.5%), de personas en pobreza extrema. Este porcentaje ha venido creciendo 2 puntos porcentuales aproximadamente, cada año.

La realidad es que las políticas actuales en México tampoco han logrado disminuir la pobreza, por lo que quizás sea hora de evaluar las estrategias de las cuales nuestro presidente se sostiene para buscar un mayor equilibrio para el país.

El otro gran problema que tenemos es la exagerada dependencia de nuestro país a las remesas que nos envían nuestros connacionales que viven en Estados Unidos, muchos de ellos sufriendo en condiciones de señalamiento y persecución constante.

Según Eugenio Herrera Nuño de Gobierno del Estado, “México recibió 51 mil 585 millones de dólares en remesas entre enero y diciembre de 2021, lo que representó un aumento del 27% respecto al mismo periodo de 2020, pese a las afectaciones por la pandemia de la COVID-19, de acuerdo con cifras del Banco de México BANXICO. Aguascalientes, recibió 697 mdd, habiendo acumulado durante el 2020 la cantidad de 540 millones de dólares, es decir obtuvo un 29% adicional”. Para Aguascalientes este monto significa casi 2 millones de dólares cada día en remesas.

Constantemente he señalado que el ingreso por remesas, al no ser generado por México, siempre estará en riesgo frente a situaciones políticas con el vecino del norte, lo que en determinado momento pudiera llegar a afectarnos gravemente.

Otro tema interesante para analizar son las percepciones de nuestros asalariados. En nuestro país, el promedio de salario formal de personas afiliadas al IMSS de entre 30 y 64 años, es de 10.750 pesos (Aguascalientes 10.490 pesos), y de informales es de 5.839 pesos (Aguascalientes 6.175 pesos).

Al final debemos ser pragmáticos y muy críticos para entender que somos un país que no innova, con un sistema educativo obsoleto centrado en la memoria; que depende de las remesas, y que tiene un ingreso salarial muy bajo, que no permite a las familias cumplir con las necesidades más importantes.

Definitivamente no tenemos claro el rumbo del país en las siguientes décadas, y mientras no entendamos que debemos educar mejor, será imposible conectarnos positivamente con el desarrollo que requerimos para ser exitosos en el siglo XXI.

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